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viernes, enero 26, 2007

Javier Navarrete vendrá a Úbeda

Javier Navarrete, uno de los protagonistas de la actualidad musical cinematográfica, ha confirmado su participación en el III Congreso Internacional de Música de Cine "Ciudad de Úbeda". Su nominación al Oscar a la Mejor Banda Sonora por su magnífico trabajo para El laberinto del fauno es todo un logro para un compositor español y esperamos que el próximo 23 de febrero sea uno de los poseedores de la famosa estatuilla dorada. Y naturalmente del Goya, premio al que también está nominado.
La banda sonora de El laberinto del fauno es una de las más destacadas del pasado año y su deliciosa y ya famosa nana podría haberse escuchado en Úbeda el año pasado, pero problemas de agenda le impidieron asistir a nuestro segundo Congreso.

Nacido en Teruel en 1956, Javier Navarrete es un compositor de formación predominantemente autodidacta. Marchó a Barcelona en 1973, ciudad donde estudió con el chileno Gabriel Brncic, compositor de música electrónica contemporánea. La orientación de Javier era hacia la música "seria", pero acabó desviándose de aquella tendencia por considerarla demasiado académica y algo alejada de la realidad.

Ya en los años ochenta, el director de cine Agustí Villaronga contactó con él para que escribiera la música de su película Tras el cristal (1987). Fue su primera incursión en la música de cine y su relación con Villaronga ha sido muy fructífera con el paso de los años, plasmada en 99,9 (1997) y en El mar (2000).

En sus 20 años de carrera como compositor para la gran pantalla ha escrito cerca de una treintena de trabajos. Otro de los directores para los que ha colaborado en más de una ocasión es Óscar Aibar, para quien compuso la música de Atolladero (1995), un spaghetti-western futurista basado en un comic. Con Aibar también colaboró en Platillos volantes (2003) y, muy recientemente, en La máquina de bailar (2006). También con Antonio Chavarrías, para quien trabajó en Una sombra en el jardín (1989), Manila (1991), Susanna (1996) y Volverás (2002); así como con María Lidón, con la que ha colaborado en Náufragos (2002) y Yo puta (2004).

Y su alianza más internacional y que le ha proporcionado su candidatura al Oscar ha sido con el Guillermo del Toro, que comenzó con El espinazo del diablo (2001), y ha continuado con El laberinto del fauno. El director mexicano, que quería a Alberto Iglesias -buen amigo de Navarrete- como compositor para El espinazo del diablo, no pudo contar con él por problemas de agenda y escogió al turolense tras ver -y escuchar- El mar, tal como nos comentó en la entrevista que le hizo BSOSpirit hace algo más de un año (www.bsospirit.com/entrevistas/javiernavarrete.php).

Otros trabajos destacados ese invitado al Congreso de Úbeda son 13 campanadas (2002), de Xavier Villaverde; El alquimista impaciente (2002), de Patricia Ferreira; y El punto sobre la I (2003), de Matthew Parhill.